El serum facial es tu aliado contra las manchas en la piel, envejecimiento. Conoce cómo y cuándo usarlo..
Todas las mujeres deberíamos tener en nuestro cuarto de baño un serum hidratante del mismo modo que tenemos un desmaquillante. Cada una de nosotras, en un momento o en otro de nuestra rutina de belleza, encontrará en el serum hidratante un alivio inmediato y una sensación agradable y duradera.
Además, los científicos han puesto de relieve un elemento de importancia en el proceso de hidratación: sin hidratación, la distribución de agua en el rostro no es homogénea. Fresco y aterciopelado, un serum hidratante ofrece, además de hidratación, resultados convincentes para alisar, iluminar, rellenar y suavizar la piel.
¿Cuándo utilizar un serum hidratante?
Con activos en alta concentración, los serums hidratantes resultan muy efectivos para estimular la hidratación, la luminosidad y la frescura del rostro.
¿Quienes pueden usarlo?
- las pieles jóvenes con imperfecciones que son objeto de tratamientos desecantes.
- los hombres para aliviar las irritaciones del afeitado.
- las pieles a partir de los 30 años, para combatir las arrugas por deshidratación y como prevención anti-edad.
- las pieles maduras, para lograr un semblante luminoso y una piel menos densa.
- las pieles con sarpullidos, para calmar las irritaciones.
- las pieles expuestas al sol de manera prolongada o frecuente.
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Serum hidratante, ¡modo de uso!
En tratamiento o en cualquier momento del año, el serum hidratante puede aplicarse a la mañana o a la noche, pero siempre sobre una piel bien limpia. Para optimizar su acción y garantizar su buena absorción, vaporizar antes el rostro con agua termal.
Pero cuidado, a pesar de sus súper poderes, el serum hidratante no debe utilizarse solo. Podemos completar el tratamiento con un producto de día para tratar o proteger la barrera cutánea superficial. Puede utilizarse como base de maquillaje o con el complemento de una crema BB o CC.