Todo lo que necesitas saber sobre la caspa adherente

FALSO
La caspa se divide en dos categorías principales: caspa seca y caspa grasa. La caspa grasa (pityriasis steatoides) provoca escamas gruesas y grasas de un tono amarillento, que se forman en el cuero cabelludo, mientras que la caspa seca (pityriasis capitis) se presenta en forma de escamas con una textura más fina y ligera. Mientras que la caspa seca cae fácilmente del cuero cabelludo, la caspa grasa se acumula en la parte superior del cuero cabelludo, con escamas que se amontonan gradualmente unas sobre otras, haciendo que el cabello parezca graso en la raíz.

FALSO
Aunque la caspa grasa (también conocida como caspa adherente) es el resultado de un exceso de producción de sebo, la caspa puede afectar y afecta a todos los tipos, longitudes y texturas de cabello, desde el graso al seco. No eliminar el shampoo u otros productos de peinado por completo puede provocar caspa, así que si notas escamas grises o blanquecinas al cepillarte o peinarte, asegúrate de enjuagarte bien el cabello la próxima vez que te duches.

FALSO
La caspa puede darse por diferentes factores, entre los que se incluyen las hormonas, la alimentación, la genética, el estrés y las reacciones relacionadas con productos químicos e ingredientes. Como se ha mencionado anteriormente, lavar en exceso el cabello puede causar caspa seca si no lo aclaras adecuadamente. Por el contrario, la caspa grasa es el resultado de un exceso de sebo producido por el cuero cabelludo, por lo que puede darse independientemente de tus hábitos de limpieza de tu cabello. Si te preocupa la limpieza de tu cabello, la exfoliación del cuero cabelludo puede ayudar a eliminar el exceso de sebo y las células de la piel para lograr un cuero cabelludo inmaculado y preparado para los tratamientos anticaspa.